Eso es precisamente lo que nos haría falta, un buen Santo Inmobiliario, o mejor aún un ángel destructor que arrase.
Saludos.
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *
Comentario
Nombre *
Correo electrónico *
Web
Eso es precisamente lo que nos haría falta, un buen Santo Inmobiliario, o mejor aún un ángel destructor que arrase.
Saludos.